El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, se prepara para su primer viaje internacional en su nuevo cargo, destacando la importancia estratégica de fortalecer los lazos con los países de América Latina.
En declaraciones previas a su partida, Rubio subrayó el regreso del liderazgo estadounidense en la región, resaltando la colaboración y las oportunidades compartidas con sus socios regionales.
«Tristemente, durante años, nuestro hemisferio fue ignorado. A veces, muchos de nuestros aliados regionales sintieron que les iba mejor siendo nuestros enemigos que nuestros aliados. Eso ya no es el caso», afirmó Rubio.
Agregó: «El liderazgo de nuestro país está de regreso y nosotros respaldamos a nuestros socios regionales». El canciller de Estados Unidos hizo referencia a que la colaboración conjunta se obtendrán muchas oportunidades.
Las prioridades bilaterales que Rubio mencionó incluyen la lucha contra la inmigración ilegal masiva, el impulso al crecimiento económico y el refuerzo de la estabilidad y seguridad regional.
Panamá, Costa Rica, El Salvador, Guatemala y República Dominicana recibirán a partir de este sábado al jefe de la diplomacia estadounidense, Marco Rubio, abrumados por un Donald Trump empoderado que ha declarado la guerra a la migración ilegal y resucitado «los fantasmas del imperialismo».
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