Santiago. La construcción y rediseño del Mercado de Pekín se encuentra en la fase final, aumentando las expectativas de mejorar la calidad de vida de los moradores del entorno, que ya han visto aumentar el valor de sus propiedades.
Se espera que la insalubridad y desorden del mercado quede en el pasado, mientras los vendedores que antes tenían sus negocios están esperanzados de retomar su actividad en un lugar organizado. Muchos se vieron en la obligación de rentar un local o ubicarse en cualquier espacio en la calle para ganar su sustento.
Así lo afirma el zapatero Humberto Flete, miembro de la directiva de la Asociación de Comerciantes del Mercado de Pekín, quien valora la rapidez con que la gestión del Alcalde Abel Martínez está trabajando la obra que fue iniciada y abandonada durante la gestión de Gilberto Serulle.
Se ha planeado que para los primeros días de febrero este mercado esté listo.
Esperanza
Flete está esperanzado en que la calidad de vida mejore, ya que entiende que cualquier negocio que pongan va a dar beneficio porque habrá mucho movimiento e inversiones, lo que también beneficiará a los pequeños negocios, asegurando que irán cómodos con los inversionistas que lleguen, porque esto atraerá más clientes. “El alcalde nos dijo que los que tuviéramos contratos tendríamos nuestros módulos, y en caso de que no tuviéramos capital nos van a facilitar un préstamo del banco para habilitarlo, pero hay mucha gente que tiene 20 años y no tiene un papelito, y eso es un problema para ellos”, sostiene el representante de los vendedores. Expresó que sin el mercado los vendedores andan “como abejas sin reinas y desparpajados”, como es su caso, haciendo alusión a un espacio en un lavadero de carros, que comparte con la botánica y la sastrería que operaban en el mercado viejo.
En tanto que Jairo Arias, residente en el entorno, asegura que sus propiedades han tomado valor, ya que así como está sin terminar, una casa por allí ya la están rentando en siete u ocho mil pesos, y con el mercado anterior pagaban tres mil quinientos. “Es un buen logro para los que vivimos por aquí, se está viendo la mejoría cada día más, y el valor que está tomando esto, antes operaba un mercado con un ambiente no muy agradable, con mucha insalubridad”, sostiene Arias. Los residentes del y vendedores que piensar instalar sus puestos esperan que con su inauguración también mejore la seguridad del sector.
El mercado será más moderno y accesible
Orlando Santos, otro de los vendedores, dijo que con el rediseño hecho al mercado, la obra quedará mejor construida, porque antes parecía un palomar, al tiempo de afirmar que la vida será mejor ahora, tanto para los mismos propietarios de negocios que estarán más protegidos, como para los usuarios que no tendrán que pagar pasaje para ir al centro de la ciudad a comprar, tendrán todo más cerca aquí, y por ende saldrá más económico.
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