El eco provocado por las consignas que vociferaron miles de jóvenes en la Plaza de la Bandera demostró que en ellos hay poder de convocatoria y sus reclamos pueden ser oídos por las autoridades.
Lo que comenzó como una simple manifestación de varios jóvenes, el 17 de febrero, un día después de la suspensión de las elecciones, viajó miles de kilómetros hasta los oídos de los compatriotas que estaban en aguas internacionales. En Nueva York, Miami, Francia y España, decenas de criollos sacaron sus banderas para secundar a los que se encontraban en la Plaza de la Bandera.
Su autoridad también puede hacerse sentir en las elecciones del 15 de marzo si ellos deciden votar masivamente. En el padrón de la Junta Central Electoral (JCE) hay habilitados 2,949,117 de electores con edades de comprendidas entre 18 y 35 años. Eso representa un 40.2% del padrón, el cual abarca unos 7,443,636 votantes distribuidos en los 48.442 kilómetros cuadrados del territorio nacional.
En forma desglosada, entre 18-25 años, hay 1,292,536 votantes (17.4%); de 26-30 años, hay 887,116 (11.90%) y en el rango de 31-35 años comprende unos 769,465 (10.32%).
Los protestantes, pertenecientes a la generación millenials, influirán en la elección de 3,849 plazas: 158 alcaldes, igual cantidad de vicealcaldes, 1, 164 concejales y sus suplentes, 235 directores y subdirectores y 735 vocales.
Luego de éxito con el Trabucazo 2020, los manifestantes organizarán su estrategia de lucha y se mantendrán pendientes a la Junta, a cuya entidad electoral les fijaron puntos a tomar en cuenta para las votaciones venideras, como la identificación de los fiscales electorales y un comanejo con organismos internacionales
Pidieron que se identifiquen quiénes van a hacer los fiscales electorales en las distintas provincias y municipios del país en los próximos comicios que se desarrollarán el 15 de marzo.
La pregunta es: ¿Irán a votar?
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